El concejal Nicolás Cruz votó negativamente el proyecto de presupuesto 2026 por inconsistencias en las cifras presentadas por la Administración Municipal. César Ataya, también concejal, reconoció errores pero defendió la legalidad del proyecto.
El concejal Nicolás Cruz, miembro de la Comisión de Presupuesto del Concejo Municipal de Arauca, manifestó su rechazo a la ponencia del proyecto de acuerdo del presupuesto 2026, al detectar “múltiples inconsistencias” en los documentos entregados por la Administración.
Según Cruz, hay un desfase de hasta $15.000 millones entre las cifras presentadas en el proyecto, el Acta Confis, el POAI y otros documentos técnicos, lo que motivó su voto negativo y su petición de retirar la propuesta para realizar los ajustes necesarios. “¿Cómo vamos a surtir el debate cuando existen incongruencias de este tipo?”, cuestionó.
El concejal también solicitó respeto institucional hacia el Concejo y expresó preocupación por lo que calificó como “una curva de aprendizaje ya superada” por parte de la Administración. Adicionalmente, formalizó su declaración de oposición al gobierno local, alegando que ha sido víctima de arbitrariedades como la falta de respuesta a derechos de petición y limitaciones en su derecho a la palabra y al voto dentro de la corporación.
Por su parte, el concejal César Ataya, ponente del proyecto de presupuesto, reconoció que existen inconsistencias en algunas cifras, pero aclaró que el proyecto no incurre en ilegalidad y puede ser aprobado tras realizar los ajustes correspondientes. “Aquí no aprobamos a ‘pupitrazo’”, aseguró.
Ataya explicó que el presupuesto total asciende a más de $219.000 millones, de los cuales más de $70.000 millones están destinados al régimen subsidiado de salud. También indicó que se debe clarificar la cifra correspondiente a funcionamiento, que oscilaría entre $26.000 y $28.000 millones.
Finalmente, sostuvo que el Concejo tiene la responsabilidad de realizar las modificaciones necesarias para garantizar la viabilidad legal del presupuesto, subrayando que “hay que priorizar las inversiones en las verdaderas necesidades del municipio”.
