El ministro de Minas y Energía, Edwin Palma, aseguró que el país no enfrentará desabastecimiento de gas licuado de petróleo (GLP), e indicó que se implementarán acciones para asegurar precios accesibles y beneficiar a las comunidades más vulnerables.
Durante su visita a Arauca, el ministro de Minas y Energía, Edwin Palma, destacó la importancia de avanzar en la distribución de gas en Colombia, señalando que esta iniciativa cumple con dos objetivos principales: garantizar el abastecimiento y promover tarifas justas.
“No va a haber desabastecimiento”, afirmó Palma, y añadió que, a pesar de los retos actuales en torno a los precios, se trabajará para asegurar que estos sean justos y asequibles. El ministro señaló que este esfuerzo se desarrollará en coordinación con la Superintendencia de Servicios Públicos, con el fin de proteger a los usuarios más vulnerables, incluidos los conductores de taxis.
Acompañado del Gobernador de Arauca, Renson Martínez, el Ministro indicó que el gobierno está comprometido con una revisión del sistema de precios, regulación y vigilancia del mercado energético, resaltando que la infraestructura inaugurada beneficiará directamente a familias en Arauca, como parte de la estrategia para reducir la pobreza energética.
En relación con proyectos de interconexión energética para Arauca, el ministro explicó que la Unidad de Planeación Minero Energética (UPME) retomará una convocatoria previamente declarada desierta, con el objetivo de impulsar la transmisión y fortalecer el sistema energético nacional.
Además, se refirió a un segundo proyecto que aún se encuentra en etapa de licenciamiento ambiental. Palma señaló que existe disposición para evaluarlo como parte de una estrategia de comunidades energéticas, orientada a beneficiar a sectores vulnerables. Esta iniciativa forma parte de una propuesta mayor de la gobernación, que incluye 13 proyectos de granjas solares cuya viabilidad técnica será evaluada por el ministerio.
Finalmente, el ministro reiteró que el gobierno trabaja en una redefinición del sistema eléctrico nacional, y afirmó que no es sostenible continuar comprando energía a precios elevados de agentes concentrados en el mercado, ni depender exclusivamente de subsidios para sostener a las empresas energéticas.
