El pasado domingo en el municipio de Tame, un ataque armado dejó como resultado el fallecimiento del patrullero Roberto Carlos Pavón Ojeda y heridas graves al patrullero Giancarlo Hernández.
Según informó el coronel Carlos Angarita, comandante del Departamento de Policía de Arauca, el atentado ocurrió a las 8:15 a.m. en el barrio San Antonio cuando los uniformados realizaban labores de patrullaje.
Los atacantes embistieron a los policías con una camioneta y una motocicleta, seguido de un ataque con armas de fuego. En el lugar, Pavón Ojeda, de 28 años, oriundo de Santa Marta, perdió la vida.
“Era un joven con muchas expectativas, con una familia que cuidar. Deja una hija de tan solo dos meses de nacida”, expresó el coronel Angarita.
Tras el ataque, los delincuentes hurtaron el fusil de uno de los uniformados y huyeron del lugar. Horas después, un grupo armado se atribuyó el hecho a través de un video, lo que encendió las alarmas sobre las condiciones de seguridad en la región.
La Policía Nacional, en respuesta inmediata, desplegó un equipo especializado desde Bogotá para reforzar las labores investigativas y capturar a los responsables.
El coronel Angarita confirmó que el patrullero Pavón Ojeda recibió varios impactos de bala, uno de ellos en la cabeza, evidenciando la sevicia del ataque.
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“Invitamos a los grupos armados a desmovilizarse y optar por un verdadero camino hacia la paz. La violencia no construye un mejor futuro para nadie. Debemos aprender de estos trágicos sucesos para evitar que vuelvan a ocurrir”, enfatizó el oficial.
Ante esta tragedia, la Policía Nacional anunció una recompensa de hasta $100 millones por información que permita dar con los autores del ataque. Además, se reforzará la presencia de uniformados en el municipio con la llegada de 50 agentes adicionales para garantizar la seguridad en la zona.
