Uno de los desafíos que enfrenta el Instituto Nacional de Medicina Legal en Arauca es la identificación de cuerpos no reclamados, especialmente en un contexto fronterizo con alta presencia de ciudadanos venezolanos.
Erika Carolina García, directora seccional, explicó el proceso técnico y legal que se sigue para determinar la identidad de las víctimas, destacando las dificultades cuando se trata de personas extranjeras.
“Cuando un cuerpo ingresa como CNI (Cuerpo en Condición de No Identificado), lo primero que hacemos es un registro detallado de sus características físicas y señales particulares. Luego tomamos huellas dactilares y muestras de sangre para reserva genética”, explicó García.
Para los ciudadanos colombianos, las huellas son enviadas a la Registraduría en Bogotá, donde se cotejan con la base de datos nacional, obteniendo resultados en pocos días. Sin embargo, cuando se trata de ciudadanos venezolanos, el proceso es más complejo, ya que deben solicitar información al Saime (Servicio Administrativo de Migración y Extranjería de Venezuela). En algunos casos, la falta de registros digitales o trámites incompletos complica la identificación.
(Relacionado: Aumento de homicidios en Arauca en 2024: 187 muertes violentas registradas)
“Cuando no es posible obtener huellas dactilares, debemos recurrir al análisis genético. Sin embargo, en Arauca no contamos con laboratorio forense, por lo que las muestras son enviadas a Villavicencio, lo que puede demorar aún más la identificación”, agregó la funcionaria.
Este procedimiento es clave para garantizar que los cuerpos sean entregados correctamente a sus familias y evitar confusiones en los certificados de defunción. Es así como Medicina Legal continúa trabajando en mejorar estos procesos en un contexto donde la violencia y la migración agravan los desafíos forenses en la región.