Durante este primer año de su gobierno, el alcalde del municipio de Arauca, Juan Quenza, se dio a la tarea de hacer frente a uno de los problemas que venía en aumento en la capital araucana: los habitantes de calle.
Es así que de la mano de sus funcionarios, Policía Nacional, Migración Colombia y otras entidades han venido adelantando operativos de caracterización e identificación de estas personas para retornarlas a su lugar de origen.
“Lo que estamos buscando con los habitantes de calle, con indígenas y con población colombiana y venezolana es lograr primero caracterizar, individualizarlos y hacer el procedimiento para que estas personas puedan devolverse a la vida civil, como decimos. Pues finalmente lo que tenemos que buscar es crear la conciencia de que ellos vayan a un centro de rehabilitación, los que quieren irse voluntariamente y los que no, que retornen a su territorio como lo estamos haciendo con ciudadanos venezolanos”, expresó el mandatario local.
Según detalló el Alcalde, a inicio de este año en Arauca capital hacían presencia más de 180 habitantes de calle, cifra que se ha reducido a cerca de 30 tras los operativos de las autoridades en diversos puntos álgidos.
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A este trabajo se le suma el adelantado por la secretaría de Inclusión Social y la oficina de Asunto Étnicos donde también se han brindado las garantías para que comunidades indígenas también puedan devolverse a su territorio como ha sido el caso de los miembros de un resguardo en Arauquita.
“Esta mañana llevamos hacia el municipio de Arauquita 16 indígenas que estaban en condición de calle, en familia que pertenece a uno, a un resguardo allá y se los entregamos a las comunidades indígenas de allá. Y en la cochada que envié hace dos días para la fundación en Cúcuta, hay ocho indígenas habitantes de calle que se fueron de manera voluntaria y están en la fundación y ahorita se está haciendo en Sikuaso una caracterización porque van a ir ocho o nueve más a un centro de rehabilitación aquí en Arauca. Y lo que estamos haciendo acá es ellos, nosotros les damos el pasaje, le compramos ropa, los bañamos, los peluqueamos”, expresó.
Recompensas a los que denuncien las ‘ollas’ de droga
Quenza anunció que ya se prepara de la mano con las autoridades de orden público la aprobación de 100 millones de pesos para quienes entregue información sobre dónde funcionan y operan las ollas de expendio de sustancias psicoactivas en la capital araucana. “Voy a citar a un consejo en el despacho para que aprobemos 100 millones de pesos que tengo en una cartera para que empecemos a darle plata a los ciudadanos que me reportes donde hay ollas de expendio, por que la tercera etapa de este proceso es perseguir las ollas y los vendedores como tal”.
Finalmente, se refirió a las personas que se dedican al reciclaje que bien podrían ser confundidas como habitantes de calle según la percepción de la comunidad y dijo que su trabajo es en contra de quienes están inmersos en el mundo de las drogas.
“Los que están en reciclaje, que no están en consumo, los dejamos que sigan reciclando, ellos están trabajando. Aquí hay personas que, aunque aparenten ser de calle por su vestimenta, están trabajando en triciclos, eso no hay ningún problema”, dijo.
